Este libro me llamo la atención primero por su portada y
luego por su sinopsis, pero no ha resultado ser lo que esperaba de él. Aun así,
ha sido una historia que me ha gustado.
Un chico convencido de que las relaciones que empiezan en el instituto no son duraderas
hace una apuesta con sus amigos en la que durante unos meses tendrá que salir
con la persona que primero le pida salir los lunes y esa relación durara hasta
el viernes. Y así será como tendrá que salir durante una semana con un chico e
igual acaba perdiendo la apuesta.