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Tenía muchas ganas de leer este libro pero lo empecé con algo de miedo porque tenía mucho hype, es uno de los libros que más gustaron a las lectoras de romántica el año pasado, y yo como también me encanta ese género, tenía que leerlo. Tengo que reconocer que esperaba una historia diferente, aun así me ha encantado.
Una chica está viviendo en casa de su ex, pero cuando este se compromete con otra le pide que deje el piso.  No le queda otra que buscar un sitio donde vivir y lo que más de adapta a su bajo sueldo es compartir piso de una forma peculiar: comparten cama pero uno vive en el piso por la mañana y otro de noche.
La protagonista de este libro es una chica que vivía con su ex y cuando este le echa de su casa esta se propone superar su ruptura. Piensa que lo lleva bien y ha superado a su ex cuando él empieza a aparecerse en sitios donde esta ella para pedirle otra oportunidad. A partir de ahí, empezara a recordar cosas de su relación que su mente había olvidado que no dejan a su ex en buen lugar.
El protagonista es un enfermero que solo trabaja de noche y necesita dinero extra para sacar a su hermano de la cárcel. Su novia celosa de que ‘’viva’’ con otra mujer decide llevar ella todo el tema del alquiler por lo que los protagonistas no se conocen en persona.
Cuando empieza la convivencia se van dejando notas por el piso para comunicarse entre ellos, así poco a poco se van conociendo y haciendo amigos a través de esos post-its.
Para mi sorpresa, no tardan en conocerse en persona y cuando lo hacen la atracción entre ellos es inevitable y surge el amor.
Me esperaba una historia más simple, con menos tramas, pero me ha gustado y en especial, la historia de uno de los pacientes del protagonista, encontró el amor durante la guerra y nuestro protagonista se propone hacer que se reencuentren y empieza a buscarlo.
Es una historia de amor bonita sin llegar a ser ñoña y engancha mucho, es divertida pero también tiene sus momentos duros. 
En resumen, ‘Piso para dos’ de Beth O’Leary es un libro que me ha gustado mucho y con el que he disfrutado leyendo.


Un saludo, y ¡a leer!

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